jueves, 29 de abril de 2010

Niños que el Cine nos Dejó (XXI, Final): Parchís

Con esta entrada termina el repaso que El Edén Sideral hizo de algunos niños actores que el cine nos dejó para la posteridad, inmortalizados en la alguna vez llamada “pantalla de plata”, en filmes de géneros varios y de emociones diversas. Algunos trascendieron la barrera de los años mozos, pero de muchos otros no hemos vuelto a saber casi nada, dejados al margen de una industria que los alimentó de fama y fortuna y que luego los relegó al olvido cuando el desarrollo físico cambio su imagen de infantes y los convirtió en adultos. 64 grandes nombres pasaron por aquí, mes a mes, desde el primer “niño estrella” del cinematógrafo, Jackie Coogan (El Chico de Charles Chaplin, 1921), hasta los presentes hombrecitos de la pantalla de esta década que han transitando de la niñez a la adolescencia, y de la adolescencia a la juventud, tipo Daniel Radcliffe o Freddie Highmoore. ¡Un aplauso a todos ellos, a los que están y los que se fueron!, porque todos nosotros, alguna vez… quisimos ser ellos. Y este 30 de abril que en México se celebra el Día del Niño, queremos despedir la serie de Niños que Cine nos Dejó con el grupo musical de nuestros recuerdos: os aseguro que cantamos, nos enamoramos, nos divertimos, con este quinteto español, el mejor grupo infantil de los 80’s, el…


Grupo Parchís



Todo empezó en 1979. La compañía de discos Belter decidió abrirse paso en el mercado de la música infantil, que con artistas como el dúo Enrique y Ana estaba iniciando un período de notable éxito y repercusión en España. Aunque en la discográfica ya contaban con las referencias de algunos cantantes infantiles, a comienzos del verano de ese año abrirían un proceso de selección pública para crear un grupo musical formado por niños a quienes darían el nombre y los colores del popular juego de mesa “Parchís”. En Barcelona, las oficinas de la casa discográfica se veían invadidas cada tarde por una multitud de niños y niñas en respuesta a un anuncio publicado el 5 de julio en los periódicos que decía así:

“Discos Belter da la oportunidad a niños de 8 a 12 años que canten bien y tengan buen sentido del ritmo, para la formación de un conjunto infantil y grabar discos. Presentarse todos los días de 10 a 1 hasta el día 15 de julio, preferible vengan con una canción aprendida en: Discos Belter, c/ Gomis, 1. Barcelona.”

La inquietud de ser artista era la nota predominante en aquella cotidiana algarabía infantil. Hicieron un gran casting en busca de los futuros componentes del grupo. Y aunque supuestamente se elegirían mediante votación popular, el grupo estaba formado casi desde el principio y esta selección sólo se llevó a cabo por si acaso se encontraba algún niño que destacase por encima de los demás. Las entrevistas se sucedían, los aspirantes desfilaban ininterrumpidamente, sus facultades eran puestas a prueba. Al final quedaron sólo cinco candidatos: la ficha amarilla sería Yolanda Ventura (1968), hija del famoso trompetista Rudy Ventura. Como ficha verde estaba Gemma Prat (1969), hija del popular Joaquín Prat. La ficha blanca (o dado) era David Muñoz (1970), un joven acostumbrado a hacer anuncios en televisión que parecía tener grandes dotes para el baile y que además era amigo de Yolanda. También se unió a ellos como ficha azul Oscar Ferrer Cañada (1971), un pequeñísimo chico que también era modelo infantil de comerciales. Y como ficha roja se contrató a Constantino Fernández, “Tino” (1967), quien fue agregado al grupo por azares del destino, pues actuaba en el mismo festival escolar que el hijo de uno de los directivos de Belter, y cuando éste lo oyó cantar, convenció a los padres de Tino de llevarlo al casting donde finalmente terminaría siendo elegido como parte del grupo. Este singular conjunto se convertiría en todo un fenómeno si tomamos en cuenta su enorme popularidad y la gran cantidad de discos que vendieron a lo largo de su trayectoria, convirtiéndose en un fenómeno social, musical y familiar.






Cuando todo estuvo listo, en el mes de octubre aparecieron en el programa Aplauso, de TVE, y grabaron su primer disco, un doble LP que publicarían de cara a las Navidades de 1979, y cuyo primer sencillo fue “Superman”. El álbum, que llevó por título "Las 25 Super Canciones de los Peques" obtuvo un gran éxito a base de versiones al español de canciones de éxito, como "En la Armada", versión de "In the Navy" de Village People, "Gloria" de Umberto Tozzi, o "Demasiado Cielo" ("Too Much Heaven") de los Bee Gees. Junto a éstos, había otros temas compuestos especialmente para el grupo, entre los que destaca "La Canción de Parchís", tarjeta de presentación del grupo.

El disco fue un éxito en España, alcanzando en el mes de diciembre la cifra de medio millón de discos vendidos en España. En 1980 el grupo participa en la preselección de TVE para elegir a su representante en el Festival de Eurovisión de ese año con la canción "Corazón de Plomo". Finalmente el tema elegido sería "Quédate esta Noche", del grupo Trigo Limpio. En mayo Televisión Española sí elige a Parchís para representarla en el Festival de la Canción Deportiva - Medalla para la Canción, que se celebra en Varsovia (Polonia). Interpretan el tema "Por el Deporte a la Paz", compuesto por Juan Pardo con el que obtendrían el segundo puesto, tras los representantes de Finlandia. Para la misma cadena de televisión ponen también la voz a las sintonías de la serie de dibujos animados La Batalla de los Planetas conocida popularmente como el Comando G. Y luego se fue de gira a Sudamérica, donde el exitazo fue tal que su casa disquera preparó inmediatamente la incursión de los cinco niños en el cine familiar-musical de la época.








A finales de año, el 19 de diciembre, estrenan su primer largometraje como protagonistas: La Guerra de los Niños (Javier Aguirre, 1980), con un guión que originalmente había sido escrito antes de la integración del grupo y no se tenía contemplado para sus 5 integrantes, pero que estaba a la mano en el momento en que Belter necesitaba aprovechar el éxito que estaban teniendo sus principales artistas, por lo cual Gemma y Oscar apenas y aparecen en pantalla al inicio y al final de la cinta, dejándole un lugar más estelar a un niño gordito (Rodrigo Valdecantos) que pondrá el toque de humor a la trama, en la que Don Matías (Manuel Alexandre), dueño y propietario de un colegio de barrio, anuncia el cierre a causa de sus numerosas deudas. Algunos de sus alumnos se pondrán manos a la obra y con la ayuda de “Superman”, el perro de Don Matías, decidirán luchar contra la inmobiliaria que amenaza la existencia de la escuela... La película peca de ser una más de las cintas que se hacían en el mundo de habla hispana en la década de los 70’s y 80’s solo para entretener, sin ningún valor artístico, por lo que vista hoy día peca de ingenua y no alcanza una buena valoración, pero en su día resultó todo un éxito en España y Latinoamérica. Los temas de su banda sonora: “Twist del Colegio”, “Querido Profesor”, “Ayúdale” y “Fin de Curso”, alcanzaron los primeros lugares de popularidad.




El éxito del grupo se extiende a América, iniciando una sucesión de grabaciones de discos a ambos lados del Atlántico, discos en los que varían temas de unos a otros aun teniendo en algunos casos idéntico título. En España, por ejemplo, ese año editan seis discos distintos: "Comando G", "La Batalla de los Planetas" (éste únicamente en cassette), "Twist del Colegio", la banda sonora de su primera película, y dos discos de villancicos, ya de cara a las Navidades de 1980: uno en castellano, "Villancicos", y otro en catalán, "Nadales", que sería el único álbum editado en esa lengua a lo largo de toda su carrera. También ese año, Belter edita un doble LP con canciones de varios grupos, "Discolandia", para, aprovechando el éxito alcanzado por Parchís, poner en el mercado a otros grupos infantiles.

Con este éxito, el grupo obtiene discos de platino en países como España, Argentina o México, y con la gran repercusión de las giras emprendidas por estos y otros países de Iberoamérica, en 1981 la producción no para. Parchís es, durante este año, un elemento esencial del proyecto multimedia conjunto de la discográfica Discos Belter y la editorial Bruguera, una colección semanal en la que cada fascículo se compone de una cassette acompañada por un cómic en el que se ilustran las canciones, y que lleva por nombre "Oye Mira". Ese año actúan también por vez primera en los Estados Unidos, consolidándose como el grupo favorito de los niños y adolescentes de aquellos años.



La madre de Oscar, preocupaba por el incesante ritmo de trabajo para un niño de su edad (apenas tenía 9 años), exigió mejores condiciones y más regalías para su hijo, pues una costumbre del negocio del espectáculo era (o es) que los padres no viajaran con sus hijos a las giras para no importunarlos, cosa que los managers aprovechaban para obtener cuantiosas ganancias por presentación sin darle a los menores la parte proporcional de los ingresos monetarios. Los ejecutivos decidieron la salida de Oscar, y lo reemplazaron por otro niño sacado de agencias de publicidad, Francisco Díaz (“Frank”), de la misma edad que su antecesor, que se convirtió en la nueva ficha azul del quinteto. A su llegada, Frank se encontró con la filmación de La Segunda Guerra de los Niños (Javier Aguirre, 1981), continuación de la anterior, y fue aquí donde aumentó más aún la fama de este singular grupo, aunque en términos generales el filme sigue siendo pobre con un guión bastante predecible. Lo mejor sin duda y como suele suceder eran las canciones: "Corazón de Plomo", "Mi Bici", "Oh Jesús", "Otro Curso", "La Chica ideal", "La Nana Blanca, Nana Negra" y "Querido Walt Disney".








En 1981 el grupo también intervino brevemente -como una actuación especial- en Su Majestad, la Risa (Ricardo Gascón), y en Argentina filmó su tercera película como protagonista, Parchís Contra el Inventor Invisible (Mario Sábato), a la que le seguirían también en ese país La Magia de Los Parchís (Mario Sábato, 1982), La Gran Aventura de Los Parchís (Mario Sábato, 1982), y en España Las Locuras de Parchís (Javier Aguirre, 1982), tercera parte de la historia que inició con La Guerra de los Niños en 1980. Esta es, con distinción, la mejor de las 7 películas que rodó el grupo parchís junto a su ya habitual equipo, si bien al igual que en todas sus demás películas, consiste en una comedia musical en la que se van entremezclando canciones de Parchís y el argumento de la película. Su última aparición en la gran pantalla fue con Parchís entra en Acción (Javier Aguirre, 1983), la cuarta parte de su primer título cinematográfico.

El grupo hizo un total de siete películas como protagonistas, todas ellas entre 1980 y 1983, de calidad muy discutible, pero siendo un tremendo éxito de taquilla gracias en parte al gran público infantil que arrastraba al cine a padres y hermanos para pasar una tarde entretenida viendo las andanzas de este joven grupo de chicos.

En una entrevista le preguntaron a Ignacio Janer (integrante del comité de marketing de Discos Belter) a qué cree que se debía el éxito de Parchís. Él respondió "Fundamentalmente a la naturalidad de los niños, su forma de actuar no es fabricada, ni estudiada, ellos no tienen nada de poses, son tan naturales haciendo una entrevista con ustedes, que paseando por la calle, viendo televisión o actuando en un escenario ante 20 mil personas, su naturalidad hace que los niños se identifiquen con Parchís, porque sus integrantes se comportan como cualquier niño común y corriente". También habría que sumarle el equipo de músicos, compositores, arreglistas de primer nivel.

En 1982, Parchís había grabado un disco con versiones al italiano de los temas de La Guerra de los Niños, y en España el disco de ese año que alcanza más éxito será "Cumpleaños Feliz", que colocará su tema principal como un éxito que perdurará incluso a la misma existencia del grupo. Mención aparte merecen dos temas editados en discos sencillos: una canción dedicada a la visita que el papa Juan Pablo II realizó a España, "Ya estás aquí", y una versión del himno del Mundial de Fútbol que se celebró en 1982 en España, y que había interpretado Plácido Domingo. De cara al mercado estadounidense, editarían una versión en inglés del tema "Querido Walt Disney": "Dear Walt Disney". Llegó un momento en que Parchís estaba "hasta en la sopa". Pero su gran popularidad dio paso a la internacionalización de grupos infantiles de varias nacionalidades que competían directamente con el quinteto español. En México apareció La Banda Timbiriche (creada en 1982), en Puerto Rico se renovaba con gran éxito el grupo Menudo (creado en 1978) y aparecían Los Chicos (también creado en 1978), y de Venezuela salió el grupo Los Chamos (creado en 1980).

Dentro de Parchís, Tino era la ficha roja y desarrollaba el rol de “líder” natural del grupo, ya sea por ser el de mayor edad, su considerable estatura respecto a los otros componentes (a excepción de las chicas, las cuales también eran muy altas) o también por su dinamismo y simpatía, encandilando a todo el sector femenino de fans. Pero en el año 1983 Tino abandonaría Parchís, siendo un duro golpe tanto para sus compañeros como para la imagen en general del grupo. Sus compañeros evidentemente perdieron el trato diario con una persona que estaba con ellos desde los inicios del propio grupo y evidentemente fue una pérdida (diríamos que casi irreparable) para la imagen del Parchís, pues con él se marchaba uno de sus iconos más característicos.










El último disco de Parchís en el que Tino intervino fue “Siempre Parchís” participando en la cara A, pues en la cara B del trabajo ya debutó Chus Gómez Cambronero, un chico rubio de 14 años de edad y con experiencia en un grupo infantil Viva’s de la propia Belter, que substituiría a Tino en adelante. La variante de este álbum para el mercado americano, titulado "No Pongas el Cassette" incluye canciones regrabadas ya por la nueva ficha roja y se excluyen las que habían contado con la participación de Tino.

No obstante, la discográfica Belter no dejaría escapar así como así a un artista como Tino, por lo que tenía preparados sus propios proyectos respecto a nuestro protagonista. Recordemos que Belter desde hacía muchos años era una auténtica especialista en crear y lanzar al estrellato sus propios artistas. A diferencia de muchas discográficas que compraban material de cantantes o grupos con una fama ya probada, la discográfica sabía tocar las teclas necesarias como para hacer un éxito de la nada. Ya tenía experiencia con artistas y grupos anteriores (incluso con el propio Parchís) y nada parecía indicar que con Tino fuese diferente, además que este artista ya estaba preparado y hacía años que conocía muy bien los escenarios. Así pues, después de la marcha de Parchís, vemos a Tino convertido en un artista enfocado hacia chicas adolescentes, seguramente las mismas que ya seguían al muchacho en Parchís, aunque en esta ocasión en solitario.

Por su parte, el grupo Parchís, con una imagen más juvenil y un logo identificativo renovado, graba en 1984 un nuevo álbum, "Qué tal te va", pero no obtiene el éxito de años anteriores. Tampoco ayuda la escasa promoción que se hace de él, como consecuencia de las dificultades por las que atraviesa su discográfica, que terminaría quebrando a finales de este año. El 7 de noviembre de 1984, Discos Belter se declara en suspensión de pagos. El nuevo álbum pasa completamente desapercibido en España y se marcha del grupo David, la ficha blanca a causa de su bajo rendimiento en sus labores escolares. Su puesto lo ocuparía Michel Cambronero, hermano mayor de Chus de 17 años, y con él completarían la promoción en México, donde aún obtendrían un éxito moderado gracias a que su tema "Viva el Cinco" se utilizó como sintonía de una de las principales cadenas de televisión del país (el canal 5 de la cadena Televisa). El ingreso de Michel fue tan intempestivo que tuvo que aprenderse las coreografías en el avión que los transportaban a México para la primera gira promocional del nuevo disco.

Las canciones que Belter habría grabado para un nuevo álbum sólo pudieron ser editadas en México meses después de su repentina quiebra. Éste sería su último álbum de temas originales, que llevaría por título "Decídete, Atrévete". El poco apoyo promocional que obtuvo este álbum condicionó que su acogida fuese minoritaria. Esto unido a otros factores como la quiebra de Belter y los constantes cambios en la formación lleva a la disolución de Parchís en este año de 1985, si bien nunca llegaron a despedirse y el mundo se quedó esperando otro disco inédito, que nunca llegó.









En algunas revistas de Sudamérica la noticia de la desintegración ya se había publicado desde mediados de 1985. Pero en realidad a comienzos de 1985, Yolanda de 16 años decidió retirarse del grupo, ella quería ser actriz y había sido elegida para protagonizar la serie "Platos Rotos" de Televisión Española, por lo que fue reemplazada por una chica y el grupo siguió con una gira pequeña por España. Pero al término de la gira, los integrantes de Parchís decidieron tomarse un descanso y dejar en stand-by al grupo, sin embargo los hermanos Gómez Cambronero comenzaron con un nuevo proyecto musical llamado: Michel y Chus acompañados por 3 chicas en los coros, siendo una de ellas la que había reemplazado a Yolanda. Realizaron actuaciones en directo y cambiando de nombre a Reprise se presentan en el programa musical español Tocata, cantando "Baila", tema que habían grabado 3 años antes cuando integraban el trío Viva's. Como el proyecto no resultó lo que esperaban, deciden reagrupar Parchís, pero no pudieron contar con Frank, él prefirió seguir estudiando y trabajando como modelo publicitario por lo que se tuvo que buscar un reemplazado sólo que en vez de un chico se eligió una de las chicas que habían contratado para su proyecto Reprise. A mediados de 1985 empieza la última y desconocida etapa de Parchís: Gemma la única integrante original, Chus, Michel y las dos nuevas integrantes: Mari Mar y Cari, siguieron haciendo actuaciones en directo en España. A fines de 1985 Gemma ya de 17 años decide retirarse del grupo para dedicarse exclusivamente a sus estudios de Puericultura y es reemplazada por otra de las chicas de Reprise. Parchís, sin ningún miembro original continúo con las actuaciones en directo hasta que se desintegra definitivamente en 1991. Lamentablemente este Parchís se volvió un grupo musical independiente al no tener contrato con ninguna compañía de discos, solo hacían presentaciones en vivo cantando sus grandes éxitos y solamente en España, nunca llegó a presentarse en algún programa de televisión, por lo que no existen imágenes de sus presentaciones finales en eventos por Madrid, Sevilla, Barcelona y Málaga.




Pero la repercusión de la quiebra de Discos Belter en 1985 no sólo alcanzó a Parchís, sino también a grupos como Regalíz (creado en 1980) y al propio ex integrante del grupo: Tino. Sin duda alguna Tino tenía muchas características que le hubieran permitido triunfar como solista tal y como ya lo había hecho como miembro de Parchís, y así parecía apuntar en los dos primeros discos los cuales fueron francamente bien.




De un look todavía bastante aniñado del primer disco se pasó a una apariencia mucho más sofisticada y adulta, muy en la línea de las creaciones que por aquel entonces arrasaban tanto dentro como fuera de las fronteras españolas. La transición parecía ir bien e incluso se crearon clubs de fans de Tino, aunque desgraciadamente el tercer y último disco fue un rotundo fracaso no por el trabajo de Tino, sino por otros aspectos como el obligado cambio de discográfica debido a la desaparición de la propia Belter. Curiosamente, este tercer disco coincidió con la incorporación de Tino al servicio militar obligatorio, lo cual le llevaría algunos meses de inactividad como cantante. Según confiesa el propio Tino los momentos más duros de su servicio militar fue durante los primeros meses cuando los veteranos obligaban a cantar al excomponente de Parchís en las tradicionales “novatadas” que los soldados de reemplazo más antiguos someten a los recién llegados.

Después de cumplir con el servicio militar, con la carrera artística terminada y la compañía que le dio fama cerrada por quiebra, Tino buscó trabajo y encontró un puesto en una empresa de distribución de Barcelona. Al cabo de cierto tiempo y después de escalar posiciones, a nuestro protagonista le asignaron una delegación en Zaragoza, lugar donde conoció a la que sería su esposa y que por aquel entonces trabajaba como secretaria en esa delegación. Pero a finales de los años noventa, el destino depararía una nueva y dura prueba a Tino, pues como consecuencia de un lamentable accidente automovilístico en las inmediaciones de Murcia, le fue amputado el brazo izquierdo, siendo imposible intentar corregirle tal disminución con una prótesis. Aunque el resto de sus antiguos compañeros en Parchís al conocer tal desgracia siempre lo apoyó, esto no fue suficiente para nuestro amigo quedara absolutamente desolado. Por fortuna, con la ayuda de sus compañeros y sobre todo la de su esposa Tino supo salir hacia delante y sobrellevar esta disminución física, demostrando así que el carácter de líder en Parchís no era una simple máscara, pues en la vida real supo actuar con decisión y optimismo.





Tras la suspensión de pagos de Belter, todos los álbumes editados de Parchís quedaron con la licencia sin renovar. En 1985 los derechos los adquiriría Divulgación de Cassettes, S.A. (Divucsa), que en sus primeros años subsistiría a base de reediciones y recopilaciones del antiguo catálogo de Belter. Este mismo año 1985 reedita los álbumes "Cumpleaños Feliz", "Villancicos" y "Parchís Grandes Éxitos". En los siguientes años son constantes las ediciones de álbumes recopilatorios de Parchís en formato cassette. Con la entrada del nuevo milenio, se reeditan las bandas sonoras de las películas rodadas en España y se recuperan muchos temas de su discografía en varios recopilatorios en formato CD.

La promoción internacional obtuvo pronto su fruto, superando en Iberoamérica la fama y ventas que ya habían alcanzado en España. Por ello, Parchís mantendría una continua presencia a ambos lados del Atlántico, con giras que se prolongarían varios meses por países como Argentina, Ecuador, Colombia, Venezuela, Brasil, Perú y México, donde llegaron a llenar en sus conciertos el Estadio Azteca, uno de los mayores recintos futbolísticos del mundo, con una capacidad de 114.600 espectadores.

Esa presencia, que se haría extensiva al cine y a su aparición en los medios de comunicación de esos países, conllevaría unas muy notables ventas de sus discos, dos de los cuales, "Discolandia" y "Corazón de Plomo" se encuentran entre los más vendidos en castellano en la década de los ochenta. Concretamente, el primero en el número 58, con 1,9 millones de discos vendidos, y el segundo en el puesto número 63, con 1,7 millones de ejemplares. Se estima que el grupo llegó a vender en torno a 14 millones de discos en todo el mundo.

En numerosas ocasiones se ha hablado de la posibilidad de volver a unir el grupo, algo que no ha llegado jamás a concretarse, aunque sí es posible encontrar periódicamente apariciones de los que fueran sus componentes en entrevistas de radio y televisión, sobre todo en programas de México y España, en algunos de los cuales han llegado a interpretar brevemente alguna canción.




¿Qué ha sido de ellos?

Tino (Constantino Fernández Fernández). Nacido en Barcelona el 25 de marzo de 1967. Integrante desde 1979 a 1983. Ficha roja. En la actualidad reside en Barcelona, donde ejerce como comentarista deportivo en la radio. Está casado con Eva Artigas y no tiene hijos.

Yolanda (Yolanda Ventura Román). Nacida en Barcelona el 21 de octubre de 1968. Integrante desde 1979 a 1985. Ficha amarilla. A su salida de Parchís se dedicaría al mundo de la interpretación participando inicialmente en algunas series para TV en España hasta que se afincó en México, donde reside y trabaja en exclusiva como actriz de televisión de la cadena Televisa. Está casada con el actor Alejandro Aragón y tiene un hijo del mismo nombre.

Gemma (Gemma Prat Termens). Nacida en Barcelona el 22 de octubre de 1969. Integrante desde 1979 a 1985. Ficha verde. Estudió puericultura y dirige actualmente un jardín de infancia en Barcelona. Está casada y tiene una hija.

David (David Muñoz Forcada). Nacido en Barcelona el 23 de marzo de 1970. Integrante desde 1979 a 1984. Color blanco (el dado). Tras abandonar Parchís estudió Ciencias Económicas en Escocia y actualmente trabaja en una empresa de publicidad que diseña y retoca anuncios publicitarios, y ha colaborado para la realización de videos del grupo Kabah, Miguel Bosé y Mecano. Casado.

Óscar (Óscar Ferrer Cañadas). Nacido en Barcelona el 6 de agosto de 1971. Integrante desde 1979 a 1981. Ficha azul. Fue el integrante más pequeño del grupo y, así mismo, el primero en abandonarlo. Estudió periodismo y se licenció en Ciencias Políticas. Trabaja como director de marketing en un grupo editorial. Soltero.

Frank (Francisco Díaz Terez). Nacido en Barcelona el 6 de agosto de 1971. Integrante desde 1981 a 1985. Ficha azul. Tras la marcha de Óscar, el elegido para incorporarse a Parchís fue un niño que pese a su corta edad ya tenía experiencia como modelo publicitario. Aun no siendo uno de los componentes iniciales, sí fue uno de los que permaneció más tiempo como integrante de Parchís. Tras su paso por el grupo siguió vinculado al mundo de la música a través de su propio grupo de rock. Se dedicaba hasta hace poco a la hostelería en Barcelona pero ahora tiene planes de volver a trabajar en publicidad, donde se desempeñó años después de la ruptura del grupo. Está casado y tiene una hija.

Chus (Jesús Gómez Cambronero). Nacido en Madrid el 14 de mayo de 1969. Integrante desde 1983 a 1985. Ficha roja. Asumió el difícil reto de sustituir al líder del grupo. Tras su paso por Parchís continuaría durante un breve tiempo en el mundo de la música, al formar junto a su hermano Michel el dúo Platón, de fugaz éxito a finales de los 90’s.

Michel (Miguel Ángel Gómez Cambronero). Nacido en Hamburgo (Alemania) el 8 de septiembre de 1966. Integrante desde 1984 a 1985. Color blanco (el dado). El componente de más efímero pasó por Parchís, al que llegó en 1984 sustituyendo a David. Junto a su hermano Chus formaría luego el dúo Platón.





Dejo el enlace de una gran página que me ha servido para documentarme sobre la carrera de este simpático grupo:
http://parchisparchis92yparchisargentinos.blogspot.com

sábado, 24 de abril de 2010

Diálogos Inolvidables: Superman


Superman: la Película
(Superman, 1978)



Director: Richard Donner

Guión: Mario Puzo, David Newman, Leslie Newman, Robert Benton, Tom Mankiewickz (sobre el personaje creado por Jerry Siegel y Joe Shuster).

Elenco: Christopher Reeve, Gene Hackman, Margot Kidder, Marlon Brando, Ned Beatty, Jackie Cooper, Valerie Perrine, Glenn Ford, Susannah York.

Premios Oscar: Premio Especial por sus Efectos Visuales. Nominada a Mejor Sonido, Mejor Edición y Mejor Música Original (John Williams).




En una galaxia remota, un recién nacido es enviado por sus padres al espacio ante la inminente destrucción del planeta donde viven. La nave aterrizará en la tierra y el bebé -ya un pequeño niño-, es adoptado por unos padres granjeros que le inculcan los mejores valores. Con los años el joven se hará un hombre, irá a vivir y a trabajar a Metrópolis donde, consciente de sus poderes sobrenaturales, los usará para intentar acabar contra el mal.




Las secuencias que hemos elegido pertenecen a la génesis del más popular de los superhéroes: El planeta Kryptón está próximo a sufrir la destrucción al acercarse peligrosamente a él un astro solar de dimensiones colosales. A Jor-El (Marlon Brando), uno de los hombres sabios más respetados del planeta, se le ha prohibido continuar con sus investigaciones sobre este fenómeno, pues causaría una alarma entre la población que sus superiores consideran “innecesaria”. El científico hace el juramento de que él ni su esposa Lara (Susannah York) saldrán del planeta; pero esa promesa no necesariamente contempla a su pequeño hijo Kal-El, por lo cual prepara secretamente una cámara espacial en forma de estrella para lanzar al recién nacido al espacio antes de que todos los habitantes de Kryptón perezcan debido a la ignorancia y soberbia de sus gobernantes. Lara cuestiona la decisión de su esposo de enviar a su hijo a la Tierra, pero él la consuela diciéndole que solamente en ese planeta su vástago tendrá las ventajas que necesita para sobrevivir, y que además nunca estará sólo.






Jor-El: Viajarás lejos, mi pequeño Kal-El. Pero nunca te abandonaremos. Ni siquiera frente a nuestra muerte. La riqueza de nuestras vidas… será tuya. Todo lo que tengo, todo lo que he aprendido, todo lo que siento… todo eso y más… te lo cedo, hijo mío. Me llevarás dentro de ti… todos los días de tu vida. Harás tuya mi fuerza, verás mi vida a través de tus ojos, como tu vida será vista a través de los míos. El hijo se convertirá en padre, y el padre… en hijo. Esto es todo lo que… puedo darte, Kal-El.








Kryptón comienza a sufrir los crueles efectos del cataclismo, hay temblores e incendios, los edificios caen, la tierra se abre, pero Jor-El consigue hacer despegar la cámara espacial en el último momento y expulsarla al espacio infinito, atravesando cientos de galaxias y sistemas solares hasta poder llegar a su destino.








Más avanzado el metraje del filme nos encontramos al joven Clark Kent (Jeff East), consciente de sus poderes “especiales” pero harto de tener que ocultarlos para el resto de la humanidad. Tras la muerte de su padre adoptivo (Glenn Ford) y del encuentro del cristal maestro que venía en la cámara espacial que lo condujo a la Tierra cuando niño, emprenderá un viaje al polo norte para aclarar las dudas sobre su existencia. Alentado por una fuerza interior, construye la fortaleza de la soledad y en ella, su hogar secreto a partir de ahora, se encuentra con la imagen omnipresente de su verdadero progenitor, que le explica los secretos de su personalidad y su misión en nuestro planeta.





Jor-El: Tu nombre es Kal-El. Eres el único superviviente del planeta Kryptón. Aunque has sido criado como un ser humano, no eres uno de ellos. Posees grandes poderes, solo algunos de los cuales ya has descubierto. […] Tus poderes superarán los de los mortales. Tienes prohibido interferir con la historia humana. Si prefieres, haz que otros lo hagan con tu liderazgo. […] Vive como si fueras uno de ellos, Kal-El... Descubre donde tu fuerza y poder son necesitados. Siempre conserva en tu corazón el orgullo de tu herencia especial... Ellos pueden ser un gran pueblo, Kal-El, desean serlo. Solo les falta la luz que les muestre el camino. Por esta razón sobre todo, por su capacidad para el bien, les he enviado a ti… mi único hijo.






Consciente de su destino, el joven Clark utiliza los colores de la sábana en que venía envuelto tras dejar su planeta natal para diseñar su traje de superhéroe. Alza el vuelo, y finalmente lo vemos convertido en Superman, el hombre de acero, el defensor de la humanidad...