sábado, 22 de diciembre de 2012

¡Merry Christmas!




Señor:

Quisiera armar en estos días un árbol dentro de mi corazón y colgar en lugar de regalos los nombres de todos mis amigos. Los de cerca y los de lejos. Los de siempre y los de ahora...











Los que veo cada día y los que raramente encuentro, los de siempre recordados y los que a veces se me olvidan. Los constantes y los inconstantes. Los de las horas difíciles y los de las horas alegres...












A los que sin querer herí, y a los que sin querer me hirieron. Aquellos a quienes conozco profundamente, y aquellos a quienes conozco apenas por sus apariencias. Los que me deben, y a quienes debo mucho. Mis amigos humildes y mis amigos importantes. Nombro a todos a los que pasaron por mi vida...

















Un árbol de raíces profundas para que sus nombres nunca sean arrancados de mi corazón, y que al florecer el año próximo traiga esperanza, amor y paz, y en la Navidad, Señor, nos podamos encontrar para compartir uvas de esperanza, poniendo un poco de felicidad en aquellos que todo lo han perdido y a los que se han encontrado a sí mismos.

Felices fiestas…













No hay comentarios:

Publicar un comentario